Isla Saona, el Paraíso en República Dominicana

El Mar Caribe es un lugar mágico por muchas razones, la más atractiva por supuesto son las playas. Todos tenemos una imagen clásica en nuestra mente, el sol poniente iluminando la playa de arena blanca, las palmeras meciéndose con la brisa marina y las olas golpeando la orilla con un pulso rítmico. Isla de Zona en República Dominicana es justamente eso: un verdadero paraíso caribeño.

Se sitúa al sur de Punta Cana, a pocos kilómetros de la costa de la península que forma el Parque Nacional Cotubanamá (el antiguo parque nacional del este), Isla Saona está casi deshabitada, pero es uno de los lugares más populares de República Dominicana. . República. Su increíble naturaleza virgen y el fantástico ambiente que se respira cada día cuando visitas la isla la convierten en uno de los destinos más buscados entre los turistas que disfrutan de unas vacaciones en esta parte del Caribe.

Los indios taínos conocidos como Adamanai y descubiertos por Cristóbal Colón durante su segundo viaje estaban en esta isla. Saona es una de las tres islas del sureste de Dominica, junto con Catalina y Catalina Nita, un verdadero paraíso natural. Las estructuras de coral que se encuentran bajo sus aguas o el hecho de que la isla sea el lugar de anidación más importante son solo algunos ejemplos de la riqueza natural de esa isla.

El área de la isla es de unos 110 kilómetros cuadrados. parque nacional y está totalmente protegido. Isla Saona es un paraíso para una variedad de plantas, incluidos manglares exuberantes y grandes palmerales. Sus lagunas costeras y zonas de selva baja son hogar de muchas aves y reptiles. Las aguas que la rodean son naturalmente ricas en vida marina: a las tortugas que anidan en las orillas hay que sumar delfines, manatíes e innumerables peces y crustáceos. El valor ecológico de Isla Saona es inconmensurable a primera vista.

La forma más común de explorar el Saona suele ser en una excursión de un día. Las embarcaciones turísticas llegan a la isla por la mañana para disfrutar de las playas y diversas actividades que se pueden realizar en tierra y en las aguas circundantes. Al mediodía, todos iniciaron el viaje de regreso a sus puntos de partida. Pasar un día en Isla Saona es una experiencia que combina la belleza natural del lugar con un ambiente siempre divertido, lleno de música, baile, sonrisas… y casi siempre barra libre que vive en cada rincón de la isla.

Además del merecido descanso en la playa, Isla Saona también ofrece diversas actividades. El primero, por supuesto, está relacionado con el rico ritmo del fondo marino: está casi prohibido visitar Saona y no hacer snorkel. En muchos casos, los tours organizados incluyen esta actividad en sus programas; si no, te recomiendo traer tu propia máscara y equipo.

La versatilidad del lugar lo convierte en un destino ideal para todos. Adultos y niños pueden disfrutar de este increíble lugar y crear recuerdos que durarán toda la vida.